Una característica básica de los pagos anticipados es la expectativa de la entidad de recibir en el futuro bienes, servicios u otros beneficios; por lo tanto, se entiende que al hacer el pago, no se le transfieren a la entidad los beneficios y riesgos inherentes a las partidas que está por adquirir o recibir. Algunos ejemplos de pagos anticipados: papelería, inventarios, primas de seguros y fianzas, regalías, membresías, entre otros.